domingo, 29 de noviembre de 2009

Reconstrucción de pasamanos y barandillas para locomotoras.

(Para los angloparlantes, una versión con contenidos similares en inglés está disponible aquí).

Cuando las locomotoras llevan muchos años a cuestas, y en función de dónde y cómo hayan sido almacenadas, a menudo ocurre que los pasamanos y barandillas presentan un aspecto sucio y deteriorado. Es algo bastante habitual en las locomotoras que compro por internet y que tienen más de 20/25 años. Como por ejemplo la Primex BR141 que aparece en la siguiente foto:


Para subsanar este problema conté con la inestimable ayuda de los miembros de www.marklin-users.net, los cuales me sugirieron diversas alternativas. Una de ellas (la más "fácil") consistía en usar clips, y esta fue la primera que probé. Sin embargo, el grosor del alambre usado para su fabricación es excesivo para la aplicación que pretendemos, y no pasa por los pequeños taladros practicados en el cuerpo de la locomotora.

El siguiente experimento consistía en tomar una muestra del pasamano "viejo" y acercarse hasta una tienda de música. Una vez allí, pedir una cuerda de guitarra (de acero, no de nylon) de espesor parecido al de la muestra. En mi caso, a cambio de 1,10 €, me dieron ésta:

Una vez de vuelta a casa, con herramientas adecuadas (tenazas y/o alicates) se corta y se conforma la cuerda. Este tipo de material es menos "conformable" que el original, y en consecuencia tiene una ventaja y un inconveniente: la ventaja es que es más difícil hacer que pierda su forma (es decir, que tengamos un pasamano doblado), y el inconveniente es que las fijaciones de los pasamanos por su parte trasera (en el interior de la locomotora) va a ser también un poco más difícil (aunque no mucho).

En fin, una vez llevadas a cabo las operaciones oportunas, el resultado final es éste:

Por 1,10€ tenemos suficientes pasamanos y barandillas para una gran cantidad de locomotoras.

En la siguiente imagen podemos ver el efecto "rejuvenecedor" de las cuerdas de guitarra en una 3005 de 1959-1960 (otra cincuentona que parece haber salido ayer de Göppingen). Se puede apreciar que este material también permite la reposición de los pasamanos curvados.

domingo, 22 de noviembre de 2009

BR 81 004 (3031). Reconstrucción.

Hacía tiempo que no había entradas nuevas en este blog; en esta ocasión terminaremos la rehabilitación mecánica de la BR 81 (3031) iniciado hace más de un año.

Para los angloparlantes, una versión en inglés está disponible aquí.

Nos habíamos quedado con la locomotora sin carcasa y con las ruedas y el bielaje desmontados. Así:


En la siguiente foto se puede apreciar la total falta de lubricante y la cantidad de mugre que venía con esta locomotora. También se puede ver lo compacto de su mecanismo:


Más tarde, una vez desmontada:



A partir de aquí, se limpian todas las piezas cuidadosamente; las que lo permitan, como ruedas y bastidor, con desengrasante, y las que no (piezas bobinadas, por ejemplo) con un cepillo muy muy suave. En algunos casos (por ejemplo, interior de la tapa del motor, que acostumbra a acumular residuos de las escobillas) no va mal el papel de cocina, seco o humedecido en desengrasante.

El remontaje no tiene excesivo secreto. Como con la 3048, debe uno andarse con mucho ojo a la hora de calar las ruedas y el bielaje. Como siempre, antes de montar los ejes es conveniente engrasar ligeramente sus casquillos.



Esta locomotora presenta la particularidad del Telex que es un mecanismo relativamente delicado. Como en el interior de la locomotora el espacio no abunda, el correcto guiado del cableado y las conexiones al inversor son cruciales.



En esta última foto podeis ver un par de recortes de espuma en la parte inferior; son los insertos que deben colocarse en los alojamientos anexos a los palieres del motor para permitir la retención del lubricante. Tras ello, deben lubricarse ligeramente tanto los apoyos del motor como los engranajes.

El resultado final es el que se puede ver en las siguientes fotos; desde luego no es la BR81 con el mejor estado de conservación estético posible, sin embargo, y aunque no se haya realizado ninguna modificación sobre ella, ahora, una vez completamente limpia y engrasada, su funcionamiento es simplemente perfecto, relativamente silencioso, con una marcha lenta suave, y con el plus del Telex. Tal vez dentro de algún tiempo me anime a repintarla.